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Bnei Noaj ó Bnei Abraham ¿Cuál es la Diferencia?

ESCALA  DE IDENTIDAD ESPIRITUAL:


PRIMER NIVEL: Bnei ADAM


El ser humano, su atributo a alcanzar es el de comportarse con una buena conducta, como está escrito: “La buena conducta precedió a la Toráh” y para lograrlo Dios le ordenó seis mandamientos:



  1. No Idolatrar

  2. No Blasfemar

  3. No Robar

  4. No Asesinar

  5. No cometer actos sexuales ilícitos

  6. Establecer Cortes de Justicia


Esto también tiene una virtud y una preferencia como está escrito en Jasidut.


SEGUNDO NIVEL: Bnei NOAJ


Es la integridad de todos los preceptos, incluida la séptima mitzvá, que en realidad es cashrut, las leyes de alimentación de la Toráh, en donde lo Kosher es algo específicamente judío. Esto no es solamente una rectificación de la sociedad; se podría decir que la persona que no tiene cuidado con comer miembro de un animal vivo es un bárbaro, y eso no es bueno para la sociedad. De todos modos, al menos, literalmente no está escrito así, es una ley de las normas alimenticias.


Por lo tanto hay todo tipo de sutilezas sobre un órgano animal, que uno apenas puede discernir lo que está permitido y lo que está prohibido. Esta es una Ley como todas las otras leyes de la Toráh. Ciertamente se trata de una cierta transición hacia lo que está por encima de la naturaleza o por encima de la lógica. Todo lo que es para la corrección de la sociedad, todos los simples mandamientos de la humanidad son naturaleza, como está escrito; “El mundo se conduce de acuerdo con su costumbre”. El mundo seguirá existiendo, no será destruido. Pero todo el judaísmo, toda la Toráh, todo es milagro, las cosas no se entienden 100%, y se aprende que siempre hay algo superior a la naturaleza.


TERCER NIVEL: Bnei ABRAHAM


¿Qué es ser un Bnei Abraham? La definición contiene dos aspectos, el primero es que se dijo que es ser educado en el Camino de Abraham que es “Guardar el Camino de Dios para hacer caridad y justicia”. Esto es, ciertamente, mucho más que la observancia de los 7 Preceptos de los Bnei Noaj.


Los tres patriarcas simbolizan los tres pilares sobre los cuales se sostiene el mundo.  Abraham, es hacer actos de bondad. La bondad es gratuita, no es obligatoria, sin embargo, la profundidad de brindar bondad es desde la consciencia de “lo mío es tuyo y lo tuyo es tuyo”, un verdadero deseo de dar, altruismo puro. Está característica no se encuentra en el gentil común, solo cuando se aferra a la buena voluntad de influir, de dar, y lo hace su forma de vida, seguramente es un ascenso incomparable de nivel.


Se puede decir que para ascender de Bnei Noaj a Bnei Abraham, es cuando un gentil ya da caridad, ha aprendido las Leyes de Tzedaká. Se sabe que hay un problema grande y serio, que concierne a todos los que tienen una Institución que necesita ser sostenida económicamente es el asunto de si ¿está permitido recibir tzedaká de un gentil? Es aceptado que si el gentil no hace idolatría, guarda los 7 mandamientos de un bnei Noaj, tal vez está permitido recibir, por lo que es costumbre, hoy en día, recibir dinero del gentil.


En cualquier caso, este es un tema muy serio con respecto a “la bondad de las naciones es su pecado” Cap. 1 del Tania ¿Qué le sucede al Bnei Abraham? En cierta medida sale de ese status de  “la bondad de las naciones es su pecado” que es una innovación sorprendente. de modo que se parece al alma animal del judío, que es la cascara de Noga según el Cap. 1 del Tania: recibe un deseo real de dar, no por intereses, ni por otros motivos, no por ser arrogante y en ningún caso, por hacer idolatría, porque ya ha salido de la idolatría. Este es uno de los aspectos del Bnei Abraham. Después de todo está escrito que “el altruismo está en la naturaleza”, también está presente en los animales. Este es un tema muy importante hoy en día en biología, quizás el tema más interesante que existe en el estudio de la ciencia animal.


También vale la pena que todos sepan, si hay altruismo, el deseo de hacer el bien, unos a otros, no para recibir recompensa, si hay un deseo real de hacer el bien en la naturaleza, está escrito: “Estas son las generaciones del cielo y la tierra cuando fueron creadas”.


Abraham, la palabra Abraham, tiene el significado de Jesed, bondad, y el mundo fue creado con el atributo de Jessed, por lo que es una hermosa alusión a que el Bnei Abraham debe tener bondad así como en la naturaleza misma. El deseo de hacer verdadero bien. Un gentil que se identifica con esto y refleja esto, es un bnei Abraham. Este es un paso inmensurable.

 

El segundo aspecto tiene que ver con los 7 preceptos de los Hijos de Noé, uno de los cuales es No hacer idolatría. Según Maimónides, ciertamente es lo principal, y también varios sabios, como en Rashi y otros, se menciona que es solo quien no hace idolatría. Incluso el Rebe y textos como el Shuljan Aruj afirman que el gentil no tiene prohibido el shituf, compartir, la Divinidad asociada a una imagen o criatura. Por eso para pasar de Bnei Noaj a Bnei Abraham es necesario que haya una limpieza de la fe del gentil, dejar todo rastro de idolatría y de shituf, este es un salto también infinito.


Hasta aquí tenemos que Bnei Adam y Bnei Noaj es la raíz, y Bnei Abraham, Bnei Itzjak y Bnei Yaacov,  son un agregado a esa raíz, pero el salto importante es el que se da de ser un Bnei Noaj a llegar a ser un Bnei Abraham, y esto consiste en dos aspectos fundamentales, abandonar totalmente la idolatría, aún el shituf y aplicar correctamente las leyes de tzedaká.


Diferencias entre Noaj y Abraham Avinu

(Rav Yehonatan Gefen)


Rashi trae un Midrash que contrasta a Abraham con Noaj. Respecto a Noaj, la Torá dice: "Noaj caminó con Dios", lo cual significa que él necesitaba ayuda en su servicio divino. Pero respecto a Abraham, Dios dijo: "Camina ante Mí", lo cual significa que Abraham podía fortalecerse a sí mismo mediante sus propios medios. Los comentaristas explican que Abraham era proactivo y que tenía motivación propia; no necesitaba cosas externas que lo estimulasen a servir a Dios o a ser bondadoso. Noaj necesitaba circunstancias externas que lo empujasen hacia adelante en su rectitud.


Esta diferencia entre Abraham y Noaj no se restringe sólo a la bondad en el ámbito físico, sino que también se extiende al ámbito espiritual. Sforno escribe que Noaj criticó a la gente de su generación, pero no hizo nada al respecto. "No les enseñó a otros a conocer a Dios ni a conducirse en sus caminos". Consecuentemente, no tuvo suficiente mérito como para salvar a toda la generación. Abraham, por otro lado, fue mucho más allá del llamado del deber y le enseñó al mundo a conocer a Hashem. La bondad de Noaj era reactiva.


En nuestra generación, no hace falta buscar muy lejos para encontrar oportunidades para mejorar el mundo de alguna manera. Pero no debemos esperar que nos pidan hacerlo; si esperamos, es posible que la oportunidad nunca se materialice. Dios quiere que abramos los ojos y que actuemos antes de que nos pidan.

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